El resultado de la limpieza es evidente en cada detalle de los muebles. Las telas han recuperado su viveza y suavidad, sin rastro de suciedad ni manchas. Cada asiento se siente y se ve fresco, aportando un aire de renovación al entorno. El espacio luce mucho más acogedor y limpio, creando un ambiente perfecto para relajarse y disfrutar de la compañía de familiares y amigos.